Posted by : Vaig a Peu sábado, 28 de marzo de 2015

La Sierra de Aitana pertenece al conjunto estructural de la Cordillera Bética, en su extremo más oriental dentro de la Península Ibérica, y constituye el punto más elevado de la provincia de Alicante. Es un relieve caracterizado por los grandes desniveles, fuertes pendientes y claros ejemplos de laderas de tipo cantil-talud. Estos contrastes justifican la variedad de la cubierta vegetal y las diferentes adaptaciones que ha realizado el hombre para aprovechar sus recursos naturales. La Sierra de Aitana presenta un aspecto abovedado en sentido longitudinal de Este a Oeste, sobre todo si se observa desde el sur,  que le otorga un carácter macizo y la convierte en frontera desde el punto de vista climático y biogeográfico. Está constituida por un fragmento de la cobertera sedimentaria, fundamentalmente paleógena, que ha sido levantada por una tectónica de fractura, lo que ha configurado un horst cresta dando lugar a un escarpe de falla en la vertiente septentrional. Es este rasgo estructural el que determina su variedad climática y, por tanto, biogeográfica. De un modo general, y obviando las variaciones a una escala de mayor detalle, existe una acusada disimetría en las precipitaciones entre la vertiente septentrional y la meridional. Respecto a  las temperaturas se observan diferencias entre mitad oriental (por su proximidad a la costa y por los valles abiertos al E y al SE) y occidental (con presencia de heladas e inversiones térmicas en los valles más encajados).La estructuración del relieve, y una variada litología en la que predominan las calizas en los escarpes y en los sectores más elevados, mientras que las margas lo hacen en los taludes y fondos de valle, determinan:    Un modelado cárstico  y procesos en la evolución de los escarpes con desprendimientos de grandes bloques, deslizamientos y fenómenos de clima frío (sobre todo en el pasado) que han generado derrubios estratificados y canchales. De manera localizada, la vegetación permanente o de ecótopos singulares está representada por la  rupícola (cantiles rocosos, canchales, etc.) y la rupícola (ramblas y barrancos).
CÓMO LLEGAR: Autopista A-7 hacia Valencia, salida nº 65 BENIDORM (LEVANTE) CALLOSA D’EN SARRIÁ, por la CV-70 dirección Callosa, por la rotonda que continua hacia Guadalest, a 8 km. aproximadamente de esta rotonda, en el lado derecho, hay una pequeña área recreativa con mesas y parking. Enfrente está el Mas de la Morera donde comienza la ruta.
ITINERARIO: MAS DE LA MORERA / FONT DEL PÍ /  SENDA IZQUIERDA / RACÓ DE LES TOVAINES / EL SALT / SANXET D’ALT  / MAS DE PAPATXÍ / MAS DEL COLLAO / COLLADO CARRASCA / SENDA DERECHA / PR / PUNTOS ROJOS / PENYÓ ROC / PORT DE L’ARC / BAJADA / CORRAL DEL PORT / BANCAL / SENDA / FONT DEL PÍ / MAS DE LA MORERA.
COMPONENTES: VICENTE Y PATRO.

LA RUTA: Por fin un día despejado y primaveral. Para celebrarlo subiremos al Penyó Roc, hermosa atalaya donde observar las mejores vistas de la Marina Alta. Forma parte del pequeño circo vertical y montañoso donde nace el Barranc del Arc; flanqueado por el Alto de Sella, el Divino, Penyó Mulero y Penyó Roc y por el otro lado la Sierra de la Carrasca.

Iniciamos desde el Área Recreativa del Mas de la Morera, por la carreterita que lo rodea por la izquierda. Las primeras vistas son espectaculares, por detrás tenemos la silueta del Bérnia con las primeras luces del día y por delante los primeros farallones rocosos entre pinos y bancales de almendros.

En unas decenas de metros tomamos una pista asfaltada a la izquierda. Al ir elevándonos las vistas hacia atrás se amplían, vemos el pueblo de Guadalest a los pies de su castillo y por detrás la larga hendidura del Barranc de la Canal. Alguien ha iniciado una quema de rastrojos controlada.

Dejamos atrás la Font del Pí para el regreso y seguimos subiendo por camino de tierra. Las vistas se extienden hasta el mar y por la derecha los verticales paredones calizos comienzan a crecer imponentes. A medio camino antes de llegar al Pas del Comptador, cogemos una senda que nace a la izquierda marcada con mojones.

Estrecha y serpenteante, entre pinos nos desciende hasta media altura, pasando por debajo del Penyó Roc y del Comptador con sus extraordinarios paredones calizos. El Bérnia, algo más alejado, entre los plásticos de los invernaderos y con Callosa a sus pies,  nos deja ver parte del brumoso litoral.

Pero más que en el mar, nuestras miradas se centran en los lienzos rocosos, pétreas murallas rojizas de asombrosa verticalidad. Entramos en el Racó de les Tovaines, “les pedres que parlen”, uno de los rincones más bonitos de la zona. Minúsculo circo que crea un microclima de exuberante vegetación.

Cuenta la historia que el músico Oscar Esplá, el pintor Emilio Varela, el matemático Germán Bernácer y el arquitecto Juan Vidal, que residían en la Font del Molí, decidieron transportar un piano a este hermoso lugar, del que conocían sus especiales características acústicas, para deleitarse escuchando un concierto inolvidable.


Subimos un poco para salir del Racó y bajar de nuevo junto a otras paredes de acabado más tosco pero igual de impresionantes. Llegamos al Salt, seco como siempre, aunque rezuma un hilillo de agua que se filtra más abajo. Por unas rampas y zigzags superamos el enclave rocoso y nos situamos en la parte de arriba.

Arribamos a las ruinas del Mas de Sanxet de Dalt bajo las crestas del Penyó Cabal, donde una estrecha senda por un bosquete de pinos nos lleva hasta el helipuerto forestal y el Mas de Papatxi, hermosa casona en un lugar privilegiado, fue restaurada hace años pero sigue cerrada. Tomamos unos hidratos de carbono.

Detrás del Mas de Papatxi hay otra casa entre los pinos. Entrar por el camino y a sus espaldas nace una sendita que pasa junto a un pequeño depósito de agua y nos eleva por la Sierra de la Carrasca. Al tomar altura vemos al completo la cresta del Penyó Cabal y a su lado comienza a emerger el Puig Campana.


Alcanzamos un mínimo colladito entre la cresta, donde las vistas de extienden en las dos  vertientes, el Sanxet, Puig Campana, Els Castellets de Sella, Bérnia, el Penyó Roc que nos está aguardando, Aitana, el Penyó Divino,…. Todo un lujo visual para nuestros sentidos.

Descendemos en diagonal por la otra vertiente hasta conectar con la senda inferior del Carrascal. Dentro de las estribaciones finales del Barranc del Arc, en suave desnivel seguimos subiendo por encima de las casas de campo con sus cuidados bancales de cultivo, y nuestro objetivo al frente: El Penyó Roc.

La senda va virando a la izquierda hasta unirse a la pista del PR-CV 9 que sube de Sella a Benimantell; justo después de dos curvas cerradísimas, y antes de alcanzar el Pas del Comptador, a la izquierda veremos unos mojones. Mientras tanto, el Penyó Roc ha ido cambiando paso a paso su fisonomía.

Como todo lo desconocido, desde su base, se nos antoja difícil su ascensión. No hay senda, solo rastros y no vemos los puntos rojos. Hay que ir hacia la izquierda y cerca de la pared por la derecha buscando el mejor acceso, hasta que por fin aparece el primer punto rojo y la dirección a seguir.


Una vez plegados los bastones, hora viene la entretenida y didáctica labor de tener controlado siempre, el siguiente punto rojo hacia dónde dirigirnos. La subida es muy vertical pero está  bien marcada. No hay que tener ninguna prisa y sí, mucho cuidado, asegurando bien los pies y las manos.


Bordeamos por la derecha hasta un vertical canalón fácil de superar; después hay un pequeño lomo, quizás el punto más expuesto, pero que tiene la suficiente anchura para sobrepasarlo. Durante la trepada tenemos pocas fotos, lo que da una idea de lo entretenidas que han estado las manos.


Un empellón más y estamos en la cima. Penyó Roc (1.108 m.) ¡Alucinante! Alguien dijo que eran las mejores vistas de la Marina Alta: doy fe de ello. 360º de maravillosas panorámicas. A Patro se le ríen los huesos y me pide que le certifique en su cartilla de escalador que ha superado el IIIº+.


Hacemos fotos por todos los costados, y sobre una gran roca devoramos nuestro merecido almuerzo. Mientras, nuestra mente va clasificando y archivando por riguroso orden de excelencia, cada una de nuestras miradas: Bérnia, Ifach, Mediterráneo, Serra Gelada, Carrascal, Sanxet, Puig Campana, el mar, Aitana, el Divino, Aixortá…









Iniciamos el regreso por la parte contraria, por toda la cresta. Hay varias sendas paralelas, mejor cerca de los cortados, para seguir impregnando nuestros ojos con las vistas, y hacer asomaditas por las grietas, ventanas y canales que nos siguen maravillando desde estas  alturas.


Poco a poco el Penyó Roc va quedando atrás, lejano y desprovisto de gallardía. Por delante  la vaguada, en dirección al Port de Sella, comenzamos a subir por las onduladas crestas hacia el Penyó Mulero. Damos las últimas miradas al Puig Campana antes de desviarnos por la derecha.


Una empinada senda, pedregosa y resbaladiza, que nos deja en unos bancales cerca de un corral derruido, atravesamos otros bancales y terrazas para conectar con una vertiginosa senda que nos lleva junto a la base de las grandes paredes, por las que hace poco hemos transitado por su parte superior.

Marchamos paralelos a ellas visitando algún escondido sester, para seguir bajando hacia unos bancales de almendros y conectar con el camino de esta mañana que nos deja en la Font del Pí. Nos refrescamos en sus aguas y deshacemos camino hasta el Mas de la Morera. Preciosa ruta la efectuada.
RECORRIDO: CIRCULAR.
AGUA EN RUTA: SI. (En la Font del Pí, al inicio y al final)
DISTANCIA: 15,6 KM.
TIEMPO: 05:35 HORAS.
ALTURA MÁXIMA: 1.108 M. (Penyó Roc)
ALTURA MÍNIMA: 685 M. (Mas de la Morera)
DESNIVEL POSITIVO: 786 M.
DESNIVEL NEGATIVO: 786 M.
DIFICULTAD: ALTA. (Por la subida al Penyó Roc, el resto de la ruta es muy asequible)


Leave a Reply

Subscribe to Posts | Subscribe to Comments

Entradas Más Visitadas

Patrocinadores:

Retales Design. Con la tecnología de Blogger.

- Copyright © Vaig a Peu - Buscando Nuevos Senderos -Metrominimalist- Template by Johanes Djogan - Blog Designed by Díez Pérez - Gráfico&Web -